El domingo 6 en el programa Periodismo para Todos, Jorge Lanata con su clásico estilo se metió con los tuiteros K, que serían los usuarios de Twitter militantes del oficialismo. ¿Sería interesante ver qué hacen? Sin dudas. Es interesante ver qué hace un grupo de militantes con sus ideas y sus ídolos políticos y cómo esto se manifiesta en las redes. ¿Sólo hay militantes K en Twitter? de ningún modo, hay de todos los partidos, hay antipartidos, hay antisistema, hay escépticos, hay militantes sociales y hay gente comprometida políticamente de la sociedad civil.
Primer problema: hay truchos en todos los temas y en cualquier forma de militancia, por lo tanto el informe se pierde el universo para centrarse solamente en los K. Desde lo periodístico esto se podrá discutir, pero también es bastante claro que Lanata, lo sabemos antes de encender la tele, no simpatiza con este Gobierno.
Segundo problema: definió Twitter desde una óptica más bien fácil. A veces contarlo tan fácil hace que se pierdan muchas de las cosas interesantes de esta red.
Tercer problema: la magnitud de la opinión pública que puede generar Twitter. Lanata dijo que esto creaba opinión pública, y mi Timeline, en parte, rechazó esta idea. Ninguno lo negó, más bien se rechazó fundamentalmente por escala bajo el argumento de que unos pocos tuiteros no pueden crear opinión pública. Esto es un problema en sí mismo, porque si en Twitter existe alguna evidencia de agenda alternativa, bastaría para prestar atención a la cuestión. Lo que me parece peligroso es decir que como son unos pocos no interesa lo que digan en Twitter (que es lo que dijeron los tuiteros que coinciden con el Gobierno, al menos en mi Timeline). Esto significa que entonces la cosa se mide por fuerza y arrastre: si atraés a muchos sí, sino no. Esta es la lógica de los medios tradicionales, como también mal-dijo Lanata: es como el rating. Lo bueno de Twitter es que no existe el rating porque si bien hay temas más mayoritarios, todos los temas ocurren simultáneamente sin que nadie mire si los temas poco convocantes deberían tener espacio o no, todos caben. Estas son las redes muchachos, no es escala ni arrastre, son los lugares donde todos pueden interactuar con otros según el tema que se les ocurra y no por eso tener menos espacio.
Cuarto problema: las cuentas fake. Si utilizás el nombre o la imagen de otra personas estás haciendo algo que no está bien. Gracias a estos usos los que están a favor de la autenticación constante tendrán cada vez más argumentos. ¿Es algo condenable? todos podemos buscar (tal como lo hizo Lanata en su informe) de dónde salen esas fotos. Es decir que cualquiera de nosotros puede saber si el que dice es quien dice. Por lo tanto no sería un problema para nosotros los usuarios, en todo caso es bueno avivarnos. Por otra parte, siempre es sospechoso cuando en un espacio de información y comunicación alguien siempre dice lo mismo, que además coincide con otros. Eso no es conversar sino replicar un mismo mensaje incansablemente. Los que tenemos algún tiempo en esto lo sabemos y se huele, es simplemente un aprendizaje. Los fakes graciosos suelen ser divertidos, a los otros podemos dejar de seguirlos.
Ultima observación: me gustó la lógica del informe, no me gustó que sólo se vean los fakes K (y lo sufrí en carne propia, son muy violentos e irrespetuosos), pero conocemos la línea editorial que Lanata tomó este último tiempo (y esto no es juicio lo verdadero o falso de los hechos que muestra). Lo que sí quedó demostrado es que para mucha gente de medios las redes aún son cosas más parecidas a los medios tradicionales que a nuevas formas de intermediarnos y relacionarnos, y por eso siguen juzgándolas con las mismas categorías que a la radio o la TV.
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En varios puntos de tu artículo no estoy de acuerdo. Y digo por qué.
1.- Lanata presentó su informe sobre Twittero truchos K, es decir hacia allá apuntaba su informe. Por lo tanto no corresponde aquello de ” hay truchos en todos los temas y en cualquier forma de militancia,” como dices. En ningún momento el periodista dijo que eran los únicos.
2.- No fue errada su definición ( desde su punto de vista, siempre política) de qué es Twitter: red de microblogging sí y empresa privada, también.
3.- No estaba hablando de gente que influencia, estaba hablando de gente “creando redundancia”. Y esa redundancia es la que crea los trending topics.
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Hola Maca!
Entiendo que si desde el título se anuncia que se va a hablar de los tuiteros K, ya estaba claro desde un principio. “El que avisa…” De todos modos creo que, a pesar de no haber dicho que no eran los únicos, un poco de contexto hubiera sido un poco más “justo” y se podría haber presentado como lo que hacen los K dentro de una práctica que es relativamente habitual.
Sobre la definición, hizo la definición que entienden los medios, que a mi juicio no es la que describe correctamente a Twitter.
Sobre la redundancia y los trending, ok. Pero de todos modos mencionó expresamente “opinión pública” y luego lo comparó con puntos de rating diciendo que era muy poco y que con ese rating él no estaría en la tele. O sea: comparó cosas que no son comparables con categorías que tampoco son comparables. Sobre esa redundancia, de última, también se podría aplicar a la viralización, y entonces llegar a la conclusión de que la Web está llena de ruido, redundancia, etc.
Está bien lo que decís desde el punto de vista de que no habla de otra cosa que la que anuncia, pero hay omisiones que yo o hubiera hecho.
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